
Irak., 14 Oct-22 (Agencia).- Los legisladores de Irak eligieron este jueves 13 de octubre al exministro Abdul Latif Rashid como el nuevo presidente del país y el grupo político más grande del Legislativo designó a Mohammed Shia al-Sudani como primer ministro encargado. Nombramientos clave para terminar con un vacío político paralizante tras las elecciones de octubre de 2021. Los anuncios fueron hechos pese a un ataque con cohetes contra la Zona Verde de Bagdad en la que se encuentra el Parlamento.
Irak da pasos fundamentales para resolver la estancada formación de un nuevo Gobierno, un año después de que se celebraran las elecciones legislativas.
Los parlamentarios eligieron este jueves 13 de octubre al político kurdo Abdul Latif Rashid como el nuevo presidente del país.
Latif, de 78 años, fue elegido con 162 votos de los 261 sufragios emitidos. El nuevo mandatario se desempeñó como ministro de recursos hídricos desde 2003 hasta 2010 y ha sido asesor del jefe de Estado desde entonces.
Según los informes de la prensa local, el presidente saliente, Barham Saleh, perdió tras obtener 99 votos.
Según la ley iraquí, el mandatario debe llamar al bloque político más grande del Parlamento para que nomine a un primer ministro.
En este sentido, el Marco de Coordinación respaldado por Irán, compuesto en su mayoría por partidos chiítas respaldados por Irán y liderada por el expremier Nuri al-Maliki, nombró a Mohammed Shia al-Sudani como el líder designado del Gobierno, luego de presentar una carta formal afirmando ser el mayor movimiento del Legislativo.
Estos movimientos resultan fundamentales para desbloquear la falta de una nueva Administración, pese a que el país celebró elecciones en octubre de 2021.
Pero la verdadera prueba de fuego más próxima entre las facciones en disputa será la votación oficial del nuevo primer ministro. La ley iraquí le da a Latif 15 días para nombrar a un primer ministro, probablemente en este caso Al-Sudani, quien tendría que presentar su gabinete al Parlamento para enfrentar otra votación.
En el sistema de poder compartido de Irak, el nombramiento de la Presidencia está reservado para los grupos kurdos, mientras que el cargo de primer ministro recae en las manos de los bloques chiítas.
Justamente, las disputas políticas y las repetidas crisis en la nación impidieron el nombramiento de un nuevo Gobierno tras los comicios de hace un año. El estancamiento ha sido impulsado en gran medida por una tensa rivalidad política entre el influyente clérigo chiíta Muqtada al-Sadr y el ex primer ministro Nouri al-Maliki, respaldado por Teherán.
Al-Sadr había rechazado previamente la candidatura de Al-Sudani y ordenó a sus seguidores que asaltaran el Parlamento el pasado 30 de junio para tratar de frustrar su nominación.
El partido de Al-Sadr ganó la mayor cantidad de escaños en los comicios de 2021, pero renunció después y ordenó a sus legisladores dimitir luego de no poder asegurar un quórum para votar en un gobierno que excluiría a sus rivales respaldados por Irán.
El pasado 29 de agosto estallaron violentos enfrentamientos en las calles entre los partidarios de Al-Sadr y las fuerzas de seguridad iraquíes, lo que llevó al país al borde de una guerra civil.
Ataque con cohetes intentó frustrar los nombramientos en el Parlamento
Poco antes de la sesión, la fuertemente resguardada Zona Verde de Bagdad, en la que se encuentra el Legislativo, fue objeto de ataques con cohetes.
Al menos uno de ellos cayó cerca del edificio que alberga al Parlamento y otros impactaron en otras áreas adyacentes, según indicaron las autoridades.
La embestida retrasó la deliberación de los parlamentarios, pero no logró cancelarla.
Al menos cinco personas resultaron heridas en el asalto, tres civiles y dos militares, señalaron funcionarios de seguridad que aún no han identificado a los posibles responsables.
El embajador de Reino Unido en Irak, Mark Bryson-Richardson, calificó el ataque de “completamente inaceptable”.
“La violencia no forma parte del proceso político y se debe permitir que las instituciones estatales operen”, destacó.
Esta no es la primera vez que los ataques con proyectiles apuntan a la sede del Parlamento iraquí.
El pasado 28 de septiembre, tres cohetes apuntaron a la Zona Verde cuando fue convocada una sesión para renovar la confianza en el presidente del Parlamento, Mohammed al-Halbousi.
El influyente clérigo musulmán chiíta Muqtada al-Sadr, y mayor ganador en las pasadas elecciones, ha pedido que se disuelva el Parlamento y se celebren nuevas elecciones. La tensión sigue siendo latente.