Srinagar, India; 17 Jun-20 (Agencia).- Al menos 20 soldados indios, incluido un oficial superior, murieron en una confrontación con el ejército chino en su disputada frontera en el Himalaya, donde miles de efectivos de ambos países llevan más de un mes desplegados, informó ayer Nueva Delhi.
El lunes por la noche ocurrió un violento enfrentamiento en el Valle de Galwan, en la región de Ladakh, añadió el ejército indio en un comunicado.
En 45 años, es la primera confrontación entre los dos gigantes asiáticos que poseen armas nucleares, en la que han muerto soldados.
La pérdida de vidas en el lado indio incluye un oficial y dos soldados, se informó en un principio. Otros 17 que estaban heridos murieron más tarde.
Un militar indio en la región declaró a la Afp que no hubo intercambio de disparos. No se utilizó ninguna arma de fuego. Hubo combates cuerpo a cuerpo, según esta fuente, que no quiso ser identificada.
China, por su parte, acusó a las fuerzas indias desplegadas en la frontera de realizar ataques provocativos a sus tropas que habían derivado en serios conflictos físicos entre los dos contingentes.
El portavoz del Ministerio de Exteriores, Zhao Lijian, no dio detalles sobre víctimas del lado chino.
China ha expresado su firme protesta por el incidente, pero sigue comprometida con mantener la paz y tranquilidad a lo largo de la disputada y militarizada frontera, mencionpo el vocero.
Las tropas de las dos potencias nucleares han estado inmersas desde principios de mayo en varios enfrentamientos a lo largo de la frontera común, principalmente en Ladakh, cerca de Tíbet, y reforzaron su presencia militar en ambos lados. Llevan más de un mes separados por apenas unos cientos de metros. Oficiales militares y diplomáticos han celebrado sin éxito una serie de reuniones para tratar de resolver el estancamiento.
En Nueva York, una vocera de la Organización de Naciones Unidas expresó su preocupación. Instamos a las dos partes a guardar la máxima moderación, declaró a los medios Eri Kaneko.
Tanto India como China han expresado su deseo de una desescalada, y apoyamos una resolución pacífica de la situación actual, dijo un vocero del Departamento de Estado.
Estados Unidos vigila de cerca la situación, según el vocero, quien envió condolencias a las familias de los soldados indios fallecidos.