Glasgow, Escocia., 1 Nov-21 (Agencia).- «Es el momento de decir basta. Basta de brutalizar la biodiversidad, basta de matarnos a nosotros mismos con carbono» y «de cavar nuestra propia tumba», ha advertido el secretario general de la ONU, António Guterres, durante la ceremonia de inauguración de la cumbre climática de la COP26 en la ciudad de Glasgow este lunes. Con estas palabras, Guterres ha pedido también a la comunidad internacional que se comprometa a recortar las emisiones de CO₂ en al menos un 45%.
El máximo responsable de Naciones Unidas ha agregado que la cumbre climática debe servir para «mantener vivo el objetivo de 1,5 grados». Además, ha llamado a acabar con «nuestra adicción a los combustibles fósiles, que está llevando a la humanidad al límite» y subrayó que «los recientes anuncios climáticos pueden dar la impresión de que estamos dándole la vuelta», pero «esto es una ilusión», ya que el planeta se dirige hacia un aumento de las temperaturas de 2,7 °C a final de siglo.
El «principio del fin» de la lucha contra el cambio climático
La ceremonia inaugural ha comenzado a las 12:00, hora local, con intervenciones como la del primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, que ha hecho un llamamiento a convertir la conferencia en el «principio del fin» de la lucha contra el cambio climático, para que las futuras generaciones sufran menos las consecuencias del calentamiento global. «Si fracasamos, nuestros hijos no nos perdonarán. Nos juzgarán con amargura, y tendrán razón», ha advertido.
Asimismo, Johnson ha pedido a los líderes mundiales y a las delegaciones de 192 países «creatividad, imaginación y voluntad» para cambiar «irrefutablemente» el rumbo del planeta, porque la realidad actual «no es una película de James Bond». «Estamos aproximadamente en la misma posición que James Bond hoy, mis compañeros líderes mundiales, excepto que la tragedia de hoy no es una película y el dispositivo del fin del mundo es real», ha advertido.
«Desde hace mucho tiempo la humanidad ha agotado el tiempo en cuanto al cambio climático. Falta un minuto para la media noche del reloj del fin del mundo y debemos actuar ahora», ha urgido. Entre las acciones a emprender ha instado a comenzar a cerrar los millones de centrales de combustión de hidrocarburos que hay «en todos los rincones del planeta», eliminar gradualmente el uso de automóviles de combustión en 2035 y poner fin al uso de centrales térmicas de carbón antes de 2040 en los países en desarrollo y en 2030 los países desarrollados.
Habrá que plantar mil millones de árboles
Además, Johnson ha aconsejado plantar mil millones de árboles y detener y revertir la deforestación en 2030, algo que es «espiritualmente edificante y hermoso» para restablecer el equilibrio de la naturaleza y fijar el carbono. En definitiva, ha apostado por acometer una «revolución industrial verde» necesaria en todo el mundo al tiempo que los países más desarrollados reconocen la responsabilidad que tienen para que los que están en desarrollo lo hagan.
Por su parte, el presidente del Consejo de Ministros de Italia, Mario Draghi, ha hecho énfasis en la importancia de la juventud en la lucha contra el cambio climático durante su intervención en la inauguración: «Los jóvenes han hecho un gran servicio al traer el cambio climático al frente de nuestro debate político». Ahora, «necesitamos hacerles sentir orgullosos en Glasgow» porque «las futuras generaciones nos juzgarán por lo que consigamos».
«El cambio climático tiene serias repercusiones en la paz global y en la seguridad», puede «separarnos». Draghi ha recordado también el compromiso al que llegaron los líderes del G20 la semana pasada en Roma, cuando se acordó perseguir el objetivo de cero emisiones y limitar el aumento de la temperatura de la Tierra a 1,5. «Ahora debemos ir más lejos», ha apuntado el italiano, quien ha señalado, como Johnson, que «el dinero no es un problema si queremos usarlo bien».
Pedro Sánchez ha arrancado los discursos
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha sido el primero en arrancar los discursos de los líderes en la cumbre del clima de Glasgow, que comenzó este domingo. Sánchez, que ha abierto las alocuciones al ser el anfitrión de la última cumbre del clima de la ONU, se ha comprometido a aumentar la finaniación de la lucha contra el cambio climático.
Entre los discursos de los participantes han destacado las palabras del presidente de Seychelles, Wavel Ramkalawan, quien ha explicado como el cambio climático pone en peligro sus 115 islas: «Ya estamos luchando por sobrevivir». Por su parte, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, ha recordado que este verano se alcanzó la temperatura más alta de la historia del país siendo el calentamiento en Canadá «dos veces más rápido que el del resto del mundo». «La ciencia es clara, debemos hacer más y más rápido», ha insistido.
Otro de los líderes que ha participado es el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, quien ha calificado esta década como aquella que «determinará las próximas generaciones». Así, Biden ha pedido que la cumbre del clima sea «el punto de partida de una década de ambición e innovación» para combatir la «amenaza existencial» del cambio climático. «Es la década en la que tenemos la oportunidad de demostrarnos que podemos mantener el objetivo de (limitar el calentamiento a) 1,5 grados», ha agregado.
Por su parte, el presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, ha anunciado la ampliación en 60.000 km² de la reserva marina de las islas Galápagos y ha planteado el canje de deuda externa nacional para su conservación. Galápagos, que toma el nombre de las gigantescas tortugas endémicas que habitan en ese archipiélago, está ubicado a 1.000 km de la costa de Ecuador, en el Pacífico sur, e inspiró la teoría de la evolución de las especies del inglés Charles Darwin. La zona protegida, donde está prohibida la pesca industrial, es la segunda más grande del mundo con 133.000 km². En ella se han reportado más de 2.900 especies marinas existentes.
Francia reclama que se verifique que las ayudas lleguen a los países en desarrollo
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha reclamado durante su intervención en Glasgow, tras la conferencia inaugural, que la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) se encargue de verificar anualmente que las transferencias financieras de los Estados ricos efectivamente lleguen a los países en desarrollo para hacer frente al cambio climático. La OCDE publicó recientemente un informe en el que señalaba que, en 2020, solo se había llegado a 79.600 millones de dólares y, con los compromisos actuales, no se espera que esa brecha se cierre hasta 2023.
«Los países de África, del Pacífico, del Caribe y de América Latina y Sudamérica que más lo necesitan no son los que reciben más de esa financiación, lo sabemos», ha denunciado. «La OCDE debe seguir y hacer cada año un informe en plena transparencia de la utilización de esos 100.000 millones de dólares» que los Estados más desarrollados se comprometieron a aportar cada año a los países con menos ingresos, entre 2020 y 2025, para la acción contra el cambio climático.
Macron ha subrayado la importancia de la «confianza y la transparencia» y ha manifestado que «Francia y la Unión Europea están al nivel de sus compromisos, e incluso un poco más arriba». «Los países más pobres en África, en el Pacífico, en el Caribe viven hoy las primeras consecuencias del cambio climático», pero «todas las economías desarrolladas deben contribuir en su justa medida porque el liderazgo exige ejemplaridad», ha agregado.
El presidente francés ha recordado también que, aunque «sabemos nuestro objetivo es 1,5 °C para final de siglo», el mundo «avanza hacia los 2,7 °C». Elevar los compromisos «acelerando» para reducir emisiones de CO₂ en 2030 «es la única forma de hacer creíble (la meta de) los 1,5 grados», ha añadido.
India se compromete a lograr la neutralidad de carbono para 2070
El primer ministro indio, Narendra Modi, se ha comprometido en la COP26 a que su país alcance el nivel de cero emisiones netas de carbono en 2070, dos décadas después de lo que pide la ONU.
Esta es la primera ocasión en la que la India, un país con cerca de 1.400 millones de habitantes, se marca un plazo para la neutralidad de carbono, aunque su meta se sitúa 20 años por detrás del objetivo general de la cumbre, que apuesta por avanzar la reducción a 2050.
En un discurso ante el plenario de líderes mundiales congregados en la COP26 de la ciudad escocesa de Glasgow, Modi ha anunciado asimismo que la India aspira a que la mitad de su consumo energético provenga de fuentes renovables en 2030.